Prosigue juicio contra denominado «psicópata de los calzones»
Este martes se llevó a cabo la segunda jornada de Juicio Oral en contra de José Miguel Roa Chávez, acusado de asaltar a una treitena de mujeres, varias menores de edad, a quienes intimidaba para que le entregaran su ropa interior, sostén en todos los casos y a veces ambas prendas, además de ser acusado de 7 abusos sexuales entre tocaciones y otras aberraciones, además de receptación de diversos artículos robados.
Sin lugar a dudas el de Roa Chávez es uno de los perfiles más complejos que se ha visto en el acontecer delictual en Los Ángeles, siendo denominado el psicópata de la ropa interior o los calzones, pero tratándose de alguien con una conducta obsesiva y fetiche por las prendas íntimas femeninas, adoptando una actitud criminal con tal de saciar esa obsesión y tenerlas.
Este lunes comenzó el juicio en el cual el líbelo acusatorio leído por la magistrada presidenta Silvana Muñoz, fue tan extenso como contundente, al tratarse de 40 hechos delictuales, 30 robos con intimidación, 7 abusos sexuales y 3 delitos de receptación. El fiscal Víctor Castro, en sus alegatos de apertura, sólo bastó con indicar que se probará más allá de toda duda razonable, que el acusado es culpable de todos los delitos que se le imputan, por lo cual se pide una pena de 30 años de prisión por ello.
El abogado defensor en tanto, Jaime Zegpi, planteó una tesis interesante, en la búsqueda de la absolución de su representado, indicando que no se ha considerado un punto importante en la acusación de robo con intimidación, que es el hecho que nunca hubo motivación de apropiarse de bienes ajenos para el beneficio propio. Respecto al tema del abuso el abogado planteó que el acusado se encontraría exento de responsabilidad penal, esto porque al momento de cometerlos con sus facultades mentales perturbadas.
Consultado por Angelino.cl sobre qué significaba eso, Zegpi respondió «tanto como locura o demencia no, pero podría haber otras circunstancias que en el momento de cometer estos ilícitos lo privarían de razón… la teoría del cortocircuito» ante lo cual según el abogado no es una persona que este normal y obviamente necesita un tratamiento por aquello.
El lunes además declararon 5 víctimas, 2 de ellas menores de edad que declararon a través del sistema de circuito cerrado de televisión, mientras que este martes fueron 6 las testigos, 2 menores de edad y sólo una optó por el circuito cerrado de televisión, mientras la otra enfrentó en ver cara a cara a su agresor en la misma sala.
El fetichista dijo haber sido abusado de niño
Pero la declaración más potente fue la del mismo José Roa Chávez, quien comenzó diciendo que jamas su intención fue abusar de sus víctimas, porque no hubo contacto piel a piel, pero si con algunos utensilios, como reconoció haber abusado de una escolar utilizando el mismo cepillo de dientes de la menor y haber grabado esto en vídeo con el celular de la joven, como también reconoció haber tocado las partes íntimas de víctimas con el arma de fogueo.
Sin explicar la razón de su fetiche, dijo que este lo tiene desde que tenía 10 a 12 años, cuando sustraía las prendas íntimas de sus primas y tías, pero siempre manteniéndose en el entorno familiar. Incluso al ser descubierto por sus padres, fue castigado por ellos pero continuó con su obsesión.
Fue una vez que comenzó sus estudios de Administración de Empresas en la Universidad Católica de la Santísima Concepción en Los Ángeles, que comenzó a intentar obtener las prendas íntimas de desconocidas. Un hecho fortuito ocurrió entonces, su madre le requisa el arma de fogueo a su hermano, a quien consideraba problemático, y la esconde en el dormitorio del José Miguel, entregando el arma perfecta para que el sujeto intimidara a sus futuras víctimas.
Pero en su discurso llega a un episodio de su vida extraño, en la cual indica haber sido abusado por su hermano mayor, cuando el era muy niño. «Creo que eso me trastornó un poco» agregó, su abogado dice que también habría sido abusado por un empleador.
Sobre para qué robaba la ropa íntima, se contradice, indicando que por un lado era para excitarse y autocomplacerse, pero después orientado por el defensor, dice que porque quería saber que se sentía ser mujer, que hasta se colocaba las prendas.
Este miércoles continúa el testimonio de la larga serie de víctimas, para quienes volver a recordar los hechos debe ser muy complejo, pero por otro lado esta la satisfacción de saber que con su declaración en el juicio pueden aportar los fundamentos necesarios para que hombres como José Miguel Roa estén recluidos y no en libertad amenazando a otras mujeres.
Para el jueves habría quedado agendada la declaración de los peritos psiquiatricos y forenses, cuya declaración será clave tanto para la fiscalía como para la defensa, de poder establecer cual sería el trastorno que tendría este hombre, para haber efectuado los abusos que cometió.